martes, 3 de marzo de 2009

Autoestima literaria (parte 1): Repitan conmigo, "No voy a escribir un Harry Potter"

Al igual que otros miles de millones de lectores, soy fanática de la saga Harry Potter desde...siempre. No recuerdo qué hacían antes de leer Harry Potter. A partir de la lectura del tercer libro (que fue el primero de la saga que leí yo) todo comenzó a tomar forma. Jamás había estado tan obsesionada con algo, con ningún otro libro había sentido antes lo que sentí con ese, con ninguna otra historia me había involucrado de una manera tan personal.
J.K.Rowling, la escritora de Harry Potter, dijo una vez: “Quise ser escritora desde el momento en que supe lo que era un escritor".
Yo podría pasarme toda la vida tratando de definir lo que un escritor es sin obtener un resultado satisfactorio, así que, lamento desilusionarlos, pero no sé a qué se refería Rowling con esa respuesta.

Sin embargo, les daré mi interpretación. Yo creo que hay distintos tipos de escritores, o distintas maneras de serlo. Están los que buscan entretener y los que informan; los que publican toda una colección de novelas y los que sólo han redactado una idea. Los que se consideran a sí mismos como escritores y los que necesitan de la publicación y de la fama para asegurarlo.
Hay escritores que viven de lo que escriben y también están los que escriben acerca de lo que viven.
Lo que todos tienen en común es que en ningún caso es posible dar una definición exacta. Irónico, ¿no? Transportamos todo un mundo a palabras, pero no podemos dar una defición que abarque por completo nuestro oficio. Es como si quisiéramos definir a la literatura misma. Hay muchas formas de definirla, pero ninguna que lo abarque todo.

Pero no me dejen irme por las ramas. De lo que hoy les quería hablar era acerca de la autoestima literaria vinvulada con la fama.

Si están escribiendo, estén recién empezando o no, háganle un gran favor a la obra en la que están trabajando y no piensen en la publicación. Es totalmente prudente querer escribir para publicar pero también es totalmente innecesario escribir con esa presión constante. Relájense.

Escriban para ustedes mismos, pero pensándose como lectores y si a ustedes les gusta lo que leen, a alguien más le gustará. Y si quieren escribir para otro lector, está bien...pero sobretodo les recomiendo que piensen en sus personajes. Ellos les contarán su historia y requieren de ustedes para llegar hasta la última página. Solo necesitan escucharlos, solo a ellos y a nadie más.

Téngase fe de que les puede pasar como a Rowling, y vender millones de libros con una buena historia, pero no dejen que ese sea el objetivo. No se condicionen tanto. Piensen más en la historia que en la fama que con ella pudieran conseguir. Porque todo se reduce a la historia. Si la historia lo amerita, tendrán todo lo demás.

Escriban felices... y coman perdices.

En la próxima: en la segunda parte de autoestima literaria, hablaremos de los extremos...¿les parece? Gracias por comentar y espero que les siga gustando el blog. Saludos, escritores.

12 comentarios:

jimeneydas dijo...

Escritores hay de todo.... escritores por compulsión y los que meditan mucho sus escritos. Los que publican veinte poemas diarios y los que muy de cuando en cuando escribimos tres líneas... Escritores descuidados que subimos nuestros sin el trabajo que requieren ... y sobramos también los que tenemos muchísmas ideas en el disco duro... (antes se tenían en el tintero, jeje). ¡Me gustó mucho este blog!

Samir Muñoz dijo...

Me llamo la atencion la suerte consejos que escribes... O mas bien las impresiones respecto al oficio de escribir :] Tengo 16 años y a veces escribo y lo publico en el blog...
Bueno, eso saludos :)

Angela Arias Molina dijo...

Estoy completamente de acuerdo. Debemos enamorarnos de lo que escribimos, mejorarlo hasta donde podamos, pensar en las circunstancias y en nuestros personajes y todo hasta que quedemos satisfechos con lo escrito.
Cuesta mucho, porque si somos detallistas -como yo :p- estaremos editando, cortando, agregando y demás siempre en la historia, lo cual es bueno para mejorar nuestros textos y sumamente necesario si a penas estamos empezando.
Pero siempre ese trabajo debemos hacerlo por nosotros -satisfacción personal, lo llamo yo-. Y sí, si a nosotros nos gusta a alguien más le agradará.
No hay que escribir para publicar, sino para agradarnos a nosotros mismos. Lo demás, como dicen, vendrá por añadidura.

Unknown dijo...

Ese consejo Rocío, es básico. Tienes taaaanta razón. Todos fantaseamos con ver nuestra historia en el aparador de alguna librería, vendiéndose como "pan caliente". Pero qué caso tendría escribir para un público que no conoces y que siempre cambia.
No hay nada mejor que uno sea su propio público y es cierto, te relajas y fluyen mejor las palabras.

Gracias por éste artículo, promete mucho tu espacio.
Salu2

Rocío dijo...

Hola Jimeneydas!
Bienvenido al blog!
Tenés razón, hay escritores de todo tipo, y por eso también se vuelve tan difícil dar una definición del oficio.
Y ojo, no te desanimes si escribis poco o cada tanto, lo importante es hacerlo.
gracias por pasar y comentar!

Nos leemos en la próxima!

Rocío.

Rocío dijo...

Hola Samir!
Gracias! Gracias por todo, por pasar, por comentar y por decirme que te gustan mis impresiones.
Te lo agradezco mucho, nos estamos leyendo!
suerte!
ahh!, y segui escribiendo en tu blog, esta muy bueno!

Rocío.

Rocío dijo...

Hola Angela!
Guau! resumiste en pocas palabras (y mejor) todo lo que quise decir en la entrada.
Gracias por visitarme otra vez y dejarme tu comentario. Me gustan mucho tus opiniones.
ah, una cosa, no te preocupes por ser detallista, creo que un 90% de los escritores lo son. Incluyéndome, por supuesto... :)

hasta la próxima!
suerte!

Rocío.

Rocío dijo...

Hola Alexandra!
Gracias! Tenés razón en cuanto a que el público siempre está cambiando, por eso no hay que pensar tanto en él...por mas que lo intentemos, nunca se puede dejar a todos satisfechos. Preferible escribir algo que nosotros disfrutemos, ante todo.

Bueno, gracias por pasar otra vez y dejar tu comentario!
suerte!

Rocío.

Anónimo dijo...

me parecen muy logicos tus consejos ,creo que me van a ayudar bastante a la hora de terminar mis historias por que tengo un monton de ideas pero no he podido acabar algunas,y habeces me explayo mucho en narrar y casi nada de dialogo lo que hace que las escenas esten bien descritas pero que no hayga mucha participacion de los perzonajes , voy ha seguir el consejo de dejar que el perzonaje lo cuente , es bueno no pensar en la publicacion ,no hay que escribir por dinero,hay que escribir por que quieres hacerlo y te gusta y hay que tener confianza en uno mismo y que lo vamos alograr . muchas gracias por los consejos ,tu blog es genial .

Rocío dijo...

Hola Belent!

Gracias por tu comentario! Espero poder ayudarte con mis sencillos consejos a terminar esas historias que tenés en la cabeza.
Sí, es verdad, como dije en la entrada, lo mejor en mi opinión es dejar que los personajes nos cuenten la historia. Después de todo, ¿no la saben mejor que nosotros? jaja...
La idea, creo, es escribir por placer y si después viene con eso la publicación y el éxito, bienvenidos sean...
¡ánimo que se puede!
hasta la próxima y gracias por pasar!

Rocío.

Unknown dijo...

Jaja de perdido vine a parar acá, y me doy cuenta q también eres fanática de Harry Potter y la verdad es que yo también lo soy.

Me gustó esta entrada, ^^ y más cuando dices so de "pensándose como lectores y si a ustedes les gusta lo que leen, a alguien más le gustará." jeje es algo que he hecho =) quizá no les guste a muchos, pero al menos a mi y a algunos que me leen si. Esperemos cono nos va =P jaja

Un saludo de nuevo,
Reimer A. =)

Rocío dijo...

Hola REIMER! :)

Sí, quizás los lectores no sean siempre los que juzgan la obra. Nosotros, como escritores, lo hacemos desde el primer momento y si nos gusta lo que leemos nos motiva a seguir.

Saludos,
Rocío.